Pese al aumento del crimen, varias regiones no han gastado ni el 5% de su presupuesto en seguridad. Expertos piden mayor presión y proponen alternativas para acelerar la inversión.
La inseguridad en el Perú sigue en aumento, con 1,829 homicidios registrados hasta noviembre de 2024, según el Sinadef del Minsa. En Lima, la PNP reportó 58,000 casos de hurto común, 35,000 de robo, 15,000 de hurto agravado y 10,000 de estafas. Sin embargo, pese a la gravedad del problema, las autoridades no parecen actuar con urgencia. Según el portal Consulta Amigable del MEF, 13 regiones no han ejecutado ni el 5% de su presupuesto para seguridad, y cinco de ellas, al 28 de febrero, no han gastado ni un sol.
Casos como el de La Libertad reflejan la falta de ejecución de recursos. La tasa de victimización subió de 23% a 25% en un año, y pese a contar con S/6.7 millones para seguridad, proyectos como la compra de patrulleros y motos para la policía aún no registran avance. Otras regiones, como Apurímac, con S/57 millones asignados, solo ha ejecutado el 0.8% de su presupuesto, mientras que Madre de Dios ha utilizado el 97.3% de los S/786,820 destinados a seguridad, mostrando grandes diferencias en la gestión de recursos.
Expertos advierten que la baja ejecución se debe a la falta de capacidad de gestión en los gobiernos regionales. David Tuesta, exministro de Economía, sugiere reasignar fondos no ejecutados a entidades más eficientes, mientras que Carlos Casas, exviceministro de Economía, plantea mayor presión desde el gobierno central y la población. La economista Stephani Maita del IPE resalta la necesidad de priorizar proyectos de seguridad y sugiere recurrir a asociaciones público-privadas o el esquema de obras por impuestos para acelerar la inversión.