LEVANTA OBSERVACIONES A OBRA DE AGUA POTABLE EN LA ISLILLA.

Loading

Las observaciones que inicialmente habían hecho las poblaciones de las caletas de La Tortuga y La Islilla, en la provincia de Paita, a la tubería que se estaba usando en una obra de agua potable y alcantarillado que se ejecuta en ambos lugares, con un presupuesto de 41 millones de soles, ya fueron levantadas, según el subgerente de obras de la municipalidad provincial de Paita, ingeniero Oscar Namuche.
Contó que eso se dio a raíz de una queja que hubo de parte de los alcaldes delegados y de un comité de vecinos sobre la fecha de fabricación de la tubería mencionada. Les preocupaba que esta tuviera una resistencia menor a la que debía de tener y datara del año 2018. El supervisor de la obra convino en trasladar esa observación a la empresa contratista, luego de constatarse de que lo dicho era cierto, y esperar una respuesta de ella, pidiéndole, además, que su contestación viniera acompañada de los respectivos certificados de seguridad.
En su réplica, la empresa se comprometió a cambiar la tubería ya colocada y fabricada en el 2018 por una más reciente y del presente año. Más que todo, se dijo, para evitar algún conflicto social que pudiera surgir por un mal entendido. La contratista también cumplió con alcanzar los respectivos certificados de seguridad solicitados sobre la tubería. Las especificaciones consignadas allí, según el citado funcionario de la municipalidad de Paita, se ajustaban a lo recomendado en el expediente técnico y a lo que piden las normas peruanas.
Según ellas, para este tipo de obras, el factor de seguridad recomendado es el C=1.6 o algo mayor. Como la población crece, utilizar una tubería de un estándar menor al referido puede comprometer la calidad global de la obra, dicen.
Más antes, entrevistado por la prensa, un ingeniero sanitario, Juan Carlos López Fernández, quien también es asesor del Comité Técnico del Instituto Nacional de Calidad (Inacal), adscrito al ministro de Producción, había exhortado, al supervisor de dicha obra, el mayor celo posible para evitar la inobservancia del expediente técnico y la utilización de una tubería de menor resistencia a la que se requiere para darle durabilidad a la obra.
La contratista que tiene a su cargo la ejecución de esta obra debe reiniciarla en las próximas semanas. Se vio obligado a interrumpirla, después de haberla empezado en febrero, casi un mes después de haber suscrito el respectivo contrato con la municipalidad de Paita, por la pandemia y la cuarentena que se impuso a principio de la segunda quincena de marzo.
Además de las caletas de La Tortuga y La Islilla, también se beneficiarán, con esta obra de agua potable y alcantarillado, los balnearios de Yacila y Los Cangrejos. Lo que se invertirá allí ascienda a la suma de 41 millones 502 mil, 454 soles. Y debe ejecutarse, según el expediente técnico, en un plazo de 300 días calendarios.
Compartir